La mecanización de poda en altura y desmontado de árboles
Los trabajos de poda en altura y desmontado de árboles han sido realizados mediante trepadores o cestas sobre grúa hasta no hace mucho tiempo. Sin embargo, los métodos utilizados suponen demasiado riesgo para el operario que los realiza. Dichos operarios deben de recibir una formación especializada y la productividad que pueden llevar a cabo está limitada por el riesgo de accidente y la accesibilidad a la rama a podar o árbol a desmontar.
En los países del Norte de Europa y en Estados Unidos ya existen desde hace unos 15 años fabricantes de implementos y máquinas especializadas para llevar a cabo de una forma segura y productiva la poda en altura y desmontado de árboles. Dichos implementos se pueden montar sobre excavadoras convencionales o maquinaria más especializada como una excavadora con brazo telescópico o una retroaraña.
En este momento encontramos dos soluciones principales, la pinza con cizalla o sierra y la podadora telescópica de 17 m ó 23 m.
Pinza con cizalla o sierra
Con estos implementos, las ramas cortadas se pueden manipular fácilmente consiguiendo retirarlas del árbol en cualquier posición salvando obstáculos en su vía de escape como pueden ser tejados, líneas eléctricas, coches, … y apilarlas de tal manera que su recogida y posterior manipulación sea mucho más rápida y eficaz.
Podadoras con brazo telescópico de alcance 17 ó 23 metros
También existen máquinas base podadoras con brazo telescópico de alcance 17 ó 23 metros, que llevan en su punta un disco de 600 mm de diámetro con giro continuo.
Con el fin de disminuir el riesgo de electrocución en líneas de alta tensión, el material con el que está construido el brazo es de fibra de vidrio, aislante eléctrico. Asimismo, las cabinas están diseñadas para el trabajo forestal (certificación FOPS, ROPS, OPS).
Mediante la utilización de estos implementos/máquinas se consigue la mecanización de los trabajos de poda en altura y desmontado de árboles aumentando la seguridad en el lugar del trabajo, la productividad y la calidad del acabado una vez finalizado el trabajo.
España se encuentra en un periodo de especialización del sector y en algunas regiones ya se utilizan estos implementos sobre excavadoras o retroarañas y máquinas podadoras de 17 m ó 23 m. Queda claro que la poda y desmontado de árboles en España sigue realizándose con métodos manuales.
Con la experiencia ya adquirida en los países vecinos, las empresas españolas dedicadas a dichos trabajos deberían empezar a plantearse la adquisición de estas nuevas pinzas con cizalla/sierra o podadoras de disco continuo de 17 ó 23 m.
De esta manera, se profesionaliza el sector aumentando la seguridad, incrementado la producción y reduciendo costes.
